miércoles, 12 de agosto de 2009

El discreto encanto de Antares

·
Si en estas noches de verano uno mira hacia el Sur la estrella roja que brilla es Antares. Es visible desde ciudades con cielos con mucha polución (la mayoría de ellas dicho sea de paso) pero últimamente se muestra débil, con poco encanto, no privada del mismo pero sin el que en otro momento lidera al escorpión que picara al gran cazador de Orión.

Esta gigante roja es una estrella que varía irregularmente con una amplitud muy pequeña, unas tres décimas, desde la magnitud 0.9 a la 1.2 aproximadamente y actualmente está pasando un momento de debilidad que no recuerdo. No dejéis de observarla, poca gente observa este tipo de estrellas aunque desde nuestras latitudes sea difícil hacer medidas por comparación al no encontrar estrellas de referencia adecuadas.

Me gusta observarla al menos una vez cada diez días y lo cierto es que en los últimos dos meses su brillo se ha ido debilitando, ya bajando, como de altura sobre el horizonte, queriendo despedirse discrétamente, dejando paso en los cielos para que al amanecer comience a brillar el hombro de Jauza, que este año, como queriendo demostrar su superioridad al arácnido parece ir subiendo de brillo...pero de eso ya hablaremos cuando las noches sean frías. Ahora no dejemos de observar a Anti Ares, la otrora rival de Marte.

2 comentarios:

Mizar dijo...

Pues ayer te hice caso y me fijé en Antares, efectivamente está más apagada que de costumbre. Gracias por llamar la atención sobre esta cuestión.

Saludos,
Paco

Francisco Rodriguez Bergali dijo...

Pues la verdad es que sí que nunca la había visto así. Ahora, desde donde estoy, en medio de ninguna parte entre montañas, se nota bastante. Un saludo Paco.